martes, 20 de septiembre de 2011

EL SUEÑO DEL CELTA


Autor: MARIO VARGAS LLOSA
Lugar y fecha de publicación: Madrid, 2010  
Editorial Santillana Ediciones Generales, S.L.

África, República Independiente del Congo, 1903. Roger Casement, irlandés y cónsul británico, inicia un viaje que cambiará su vida y su forma de pensar. Gran admirador del aventurero galés Stanley y lleno de idealismo se adentrará  en la realidad de un continente dominado por las principales potencias coloniales de la época “El viaje que por fin emprendía duró tres meses y diez días. Roger pensaría después que ese periodo cambió su manera de ser y se convirtió en otro hombre, más lúcido y realista de lo que había sido antes, sobre el  Congo, el África, los seres humanos, el colonialismo, Irlanda y la vida” (pág. 80-81)
Las compañías extractoras de caucho y las fuerzas del  rey belga Leopoldo II tienen el control de  recursos y  nativos del Congo. Casement, enviado por el gobierno británico, debe verificar qué hay  de verdad en las denuncias que se hacen desde ciertos sectores de la sociedad sobre el cruel comportamiento de capataces y colonos con los habitantes del país. Comienza la andadura convencido de la malicia de los rumores y lo termina redactando un  Informe sobre el Congo que abrirá los ojos de la opinión pública europea y obligará a gobiernos y ciudadanos a cuestionarse  la supuesta labor “civilizadora”  que se ejerce en el continente negro. Por su parte, Roger Casement, defensor del espíritu colonialista, comienza a poner en duda  el derecho de determinadas  potencias a establecer su dominio sobre otros países  “…había descubierto la gran mentira que era el colonialismo y había empezado a sentirse “un irlandés”, es decir, ciudadano de un país ocupado y explotado por un Imperio que había desangrado y desalmado a Irlanda” (pág. 119- 120)
Y profundiza en la historia de Irlanda. Descubre su propio país, sus costumbres y sus tradiciones ancestrales. Se siente herido por un Imperio Británico que le colma de honores y nace en él un espíritu nacionalista en constante lucha contra los abusos de las grandes naciones. Es enviado a Brasil en una nueva misión  y otra vez se topa con la avaricia y la crueldad de aquellos que pretenden esquilmar las riquezas de la Amazonía y no dudan en someter a sus habitantes a los más duros trabajos y castigos. La Peruvian Amazon Company es la compañía peruana que extrae el caucho en la zona,  pero cuenta con una importante participación de capital británico “el Libro Azul sobre el Putumayo salió publicado en julio de 1912. Desde el primer día produjo una conmoción que, teniendo a Londres como centro, avanzó en ondas concéntricas por toda Europa, los Estados Unidos y muchas otras partes del mundo, sobre todo Colombia, Brasil y Perú”(pág. 324)
Cumplida su tarea, Roger Casement dedica sus esfuerzos a conseguir la liberación de Irlanda. Busca apoyos influyentes y entra en contacto secreto con políticos alemanes. Piensa que su país necesita la ayuda de una gran potencia para hacer frente al poder británico. Pero es descubierto y encarcelado. Ya no es un héroe humanitario, es un traidor a  la “patria” inglesa. Además de homosexual y pederasta,  según unos escritos aparecidos oportunamente, los Diarios Negros, que se le atribuyen al propio Casement. Fue condenado a morir en la horca en 1916. Sus restos mortales fueron devueltos a Irlanda en 1965. Recibidos con honores militares, reposan en el cementerio de Glasnevin. “La sinuosa campaña lanzada por la inteligencia británica para desprestigiarlo, utilizando fragmentos de sus diarios secretos, tuvo éxito. Ni  siquiera ahora se disipa del todo: una aureola sombría de homosexualismo y pedofilia acompañó su imagen a lo largo de todo el siglo XX” (pág. 448)

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Mario Vargas Llosa recupera la figura del irlandés Roger Casement en su novela “El sueño del Celta”. Sorprende descubrir la importante tarea que llevó a cabo y el desconocimiento general que existe sobre él. Quizás los prejuicios sobre su orientación sexual y su supuesta traición al gobierno inglés han pesado más que el reconocimiento a su labor de denuncia. A principios del siglo XX abrió los ojos del mundo a la realidad del colonialismo, lo desnudó de su aureola cultural y religiosa,  describió con todas las palabras  su verdadero significado: la explotación del hombre por el hombre motivada por intereses económicos. Y despertó algunas conciencias, además de la suya, pero “ni en el Congo ni en la Amazonía ha quedado rastro de quien tanto hizo por denunciar los grandes crímenes que se cometieron en esas tierras en los tiempos del caucho (pág. 450).

                                                                       Eloína Calvete García

jueves, 15 de septiembre de 2011

¡INDIGNACIÓN…REACCIÓN!



En poco más de 30 páginas “¡Indignaos!” [1]recoge el discurso de Stéphane Hessel. Este autor, de 93 años, miembro de la Resistencia Francesa y superviviente de un campo de concentración nazi,  aún es capaz de indignarse.  Y de lanzar  un reto a los jóvenes y menos jóvenes que se lamentan de la mala gestión de los políticos: no bastan las quejas, no es suficiente. Hay que indignarse hasta llegar a la acción, hay que demostrar que otra sociedad es posible, hay que exigir a los gobernantes, hay que luchar contra la dictadura del mercado capitalista, contra la mala gestión de los recursos naturales, contra el consumismo descarnado… Es el momento de pasar de las palabras a los hechos. Hessel promueve un levantamiento pacífico, un despertar de conciencias adormecidas que descubren que su mundo se desmorona. Hay que indignarse y reaccionar ante la crisis del sistema global empezando por nuestro entorno más inmediato.



Para  los autores de “Reacciona” ha llegado el momento de sacudirse la inercia. Por muchas razones y con una meta común: un cambio profundo en el sistema político, en la economía local y global  y en el entramado social. Es posible y  necesario encontrar la forma de sacudirse el miedo y exigir a los líderes que nos gobiernan. El mensaje de Hessel se dirige a los ciudadanos occidentales en general, el llamamiento en la obra común se ciñe a la población española. A todos aquellos que sienten que el universo conocido se tambalea y que escuchan las voces agoreras de políticos que anuncian “el fin de los tiempos”, de los tiempos de bienestar y “vacas gordas”.
El economista y escritor José Luis Sampedro señala que “es el momento de la acción entre todos porque otro mundo no sólo es posible, es seguro. Si mejor o peor, dependerá de nuestra reacción”[2]. Según Mayor Zaragoza “la igualdad, la justicia social, la conciliación y la armonía deben ser, como el medio natural, los fundamentos del mundo venidero”[3] y para el juez Baltasar Garzón hay que “reaccionar para  avanzar”, para dejar atrás, “los tiempos de la vergüenza, la mediocridad y la renuncia”[4]. Estas tres figuras, de reconocido prestigio nacional e internacional, nos llaman a la insurrección. Han unido sus voces a las de algunos periodistas y profesores universitarios que hacen en el libro un minucioso análisis de la crítica situación que atraviesa España. 
Juan Torres López, catedrático de Economía Aplicada; Àngels Martínez y Castells, doctora en Ciencias Económicas; Rosa María Artal, periodista y escritora; Ignacio Escolar, periodista; Carlos Martínez y Javier López Facal, profesores de investigación del CSIC; Javier Pérez de Albéniz, periodista y Lourdes Lucía,  licenciada en Derecho, examinan los distintos aspectos de esta crisis y sus posibles consecuencias en todos los  ámbitos de nuestra sociedad.
Como si quisieran dar respuesta al reto de Hesse, ellos han asumido su compromiso.  Es mucho lo que hay  en juego, hay que posicionarse y no dejarse llevar por el pesimismo.  No podemos perder la esperanza.  Tras la indignación, reacción.
                                                                                                                                    Eloína Calvete García


[1] Hesse, S. (2011). ¡Indignaos! Ediciones Destino, S.A.
[2]VV.AA. (2011). Reacciona. Madrid: Santillana Ediciones Generales, S.L.
[3] Íbidem
[4] Ïbidem